El Presidente del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro (TDJO), Asencio Franz Mendoza Cárdenas en inspección realizada al nuevo recinto penitenciario, constató la falta de seguridad, servicios básicos, salón de audiencias, falta de ambientes para la requisa a visitantes y un lugar donde los internos reciban a sus familiares.
La inspección se realizó este jueves 30 junto al juez de ejecución penal, Germán López Moya, quienes advirtieron que las condiciones para trasladar a reclusos a este lugar no es el óptimo, por lo que no creen que hasta fines de septiembre pueda concretarse esta posibilidad tal como habría informado en el mes de julio Sandra Soto, secretaria departamental de Seguridad Ciudadana en Oruro.
“Tendremos una reunión con las autoridades pertinentes la próxima semana para que previa inauguración se subsane estas observaciones, otro tema preocupante es la tramitación de la autorización legal para su funcionamiento por lo que solicitaremos información al respecto, de esta manera evitaremos posteriores problemas, una vez que se reúna estas condiciones revisaremos a quienes se traslada a este lugar”, manifestó Mendoza.
Según Germán López Moya, juez de ejecución penal, el nuevo recinto ubicado en la zona Este de la ciudad, puede albergar entre 250 a 300 personas privadas.
Hasta este jueves se confirmó que en la antigua cárcel se encuentran detenidas 903 personas de las cuales son 121 mujeres y 782 varones.
Del total de internos, 210 privados de libertad tienen sentencia ejecutoriada y 693 se encuentran con detención preventiva.
